El uso consciente de la respiración y la interacción entre el peso y la ingravidez genera un énfasis en los ritmos naturales de caída y recuperación.
La claridad en el movimiento y la musicalidad juega un papel importante en este entrenamiento y esto nos va a permitir llegar al punto en que nos podemos olvidar de la técnica y movernos libremente en el espacio.
La clase integra varias influencias como Graham, limón y Jazz. También se va a trabajar ejercicios de yoga, de movimiento en el suelo y en el espacio, de flexibilidad de la columna vertebral y de trabajo individual de diferentes partes corporales. Siempre centrándonos en las
sensaciónes y en la calidad del movimiento.
Además de centrarnos en la experiencia interna, también nos sumergiremos en la relación con lo que se ve en el exterior; como el aire, el suelo, los otros bailarines y la emocionalidad de la música.